Si no sabemos en dónde queremos estar en unos tres o cinco años, ¿cómo es que trataremos de conseguirlo? El planeamiento estratégico es el proceso que evita que estemos pensando únicamente en lo que sucede al día. Hace que nos preocupemos por lo importante en lugar de lo urgente, por supuesto, nos permite crear un mecanismo para conseguirlo, algo muy valioso en el mundo de las TI.

Permite la delegación de toma de decisiones

Una de las casas más difíciles que tiene que hacer un gerente es delegar la toma de decisiones. El planeamiento estratégico proporciona una manera de comunicar a los empleados lo que estamos pensando; un marco de referencia para la toma de decisiones. Así, cuando un integrante del staff se enfrenta a esto último, podrán saber con certeza si lo que están haciendo va de acuerdo a los estatutos de la compañía.

Un plan empodera a los empleados y alienta la creación de iniciativas sin que tengamos que estar involucrados en todo, lo que hace que la organización se mueva más rápido.

Nos permite responder al cambio

El cambio es algo intrínseco en las TI. Los que están preparados para ello pueden usarlo como una gran ventaja; los que no, están destinados al fracaso. El planeamiento estratégico es una herramienta con la que las organizaciones pueden asegurar el éxito. De igual manera, los cambios repentinos no tendrán tanto impacto si se cuenta con un plan de contingencia.

Nos da parámetros para el pensamiento creativo

Cuando se trata de crear soluciones para los retos organizacionales, empezar de cero suele tomar mucho tiempo. Una vez que se tiene un planeamiento estratégico de TI se pueden llevar a cabo pláticas de lo que conviene, lo que no y las características que debe presentar. Los problemas pueden ser enfrentados más rápidamente cuando todo el mundo sabe lo que la empresa quiere. Las sesiones de planeación pueden enfocarse así en las capacidades más importantes y no en las cosas con poca relevancia.

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Es una manera de lidiar con las TI en la sombras

Muchas organizaciones han visto un incremento de las TI en la sombra en los últimos años. Estas son las aplicaciones, departamentos o funciones que han sido creadas por unidades individuales y que no están afiliadas al departamento de TI oficial. Estas suelen crecer porque este último no es lo suficientemente ágil para satisfacer las necesidades de los departamentos de menor tamaño. Un planeamiento estratégico de TI permite a la compañía descubrir el origen de las TI en la sombra e incorporar esa necesidad en los objetivos generales.

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Permite comunicar nuestras intenciones a los superiores

Un planeamiento estratégico de TI es la herramienta más importante para poder comunicar nuestras intenciones a los jefes. La estrategia de alto nivel es la cosa que más les preocupa. Un plan documentado otorga la posibilidad de tener conversaciones con ellos acerca de nuestros objetivos, además de la oportunidad de redireccionar alguno de estos hacia la visión de la organización. Con esto, los líderes podrán estar al tanto de lo que el departamento de TI está haciendo sin tener que estar involucrados en las operaciones del día a día.

Por último, es fundamental tener en cuenta que un planeamiento estratégico de TI no es táctico ni prescriptivo. Un plan táctico que contiene información específica de lo que debe hacerse es un mandato, no una planeación. Uno estratégico significa contar con un marco de referencia que permita a los gerentes tomar decisiones en base a los objetivos generales.

Un planeamiento estratégico tampoco es un documento estático que nunca deba cambiar. Este debe ser concebido de tal manera que pueda ser actualizado y moldeado de acuerdo a los cambios del mercado.

Fuente: BMC