Autoridades chinas han anunciado que han detectado una nueva mutación del virus WannaCry, el cual afectó a más de 150 países durante este fin de semana.

La Administración del Ciberespacio, el Departamento de Seguridad Pública de Pekín y la Comisión Municipal de Tecnología de la Información de Pekín comunicaron que este posible WannaCry 2.0 sería capaz de saltarse las medidas de seguridad impuestas para detener a su antecesor.

WannaCry está basado en «EternalBlue», una aplicación desarrollada por la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de Estados Unidos para atacar computadoras con sistema operativo Windows valiéndose de sus fallas de seguridad.

Qin An, director del Instituto de Estrategia en el Ciberespacio de China, comentó que este tipo de armas cibernéticas son un recordatorio de la gran hegemonía que tiene Estados Unidos en la red.

Este ransomware impide a los usuarios accesar a los archivos de su computadora a menos de que paguen un rescate. La recomendación general ha sido actualizar el sistema operativo y desconectar de la red los equipos infectados.

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Un sitio web relacionado con el Partido Comunista de China afirmó que el virus podría propagarse más rápidamente debido a que en el fin de semana la mayoría de las instituciones no tienen actividades.

En aquel país; hospitales, universidades, gasolineras y oficinas de gobierno han sido afectadas por WannaCry.

Fuente: Milenio