¿El home office es para mí?
Cada persona es distinta y lo que a unos motiva a otros podría deprimirlos, así que lo más importante es evaluar realmente si el home office se ajustará a tu personalidad y modo de vida. Por eso hay que tomar en cuenta lo siguiente:
Planeación y organización
- Como no tendrás a una persona que esté físicamente ejerciendo cierta presión para la entrega de avances, es fácil perderse o que te distraigas en alguna otra actividad. Lo más importante es que, en base a los objetivos que te fijaron, establezcas horarios específicos.
Vida Social
- La idea de no ir a la oficina suena perfecta, pero ¿estás listo para no tener contacto con nadie más que tu computadora o teléfono? ¿Te atrae la idea de estar en casa todo el día? Algunas personas requieren de cierta movilidad y contacto social, de la charla con los compañeros y el cambio en la rutina.
Concentración y enfoque
- Es perfecto para actividades que requieran cierta concentración y sobre todo de aislarte un poco para pensar, diseñar y llegar a una solución.
Poner Límites
- Corres el riesgo de no salir nunca del trabajo. Muchas veces, como no se cambia de espacio y se está “siempre conectado”, podrías encontrarte fácilmente en una situación de estar atrapado siempre en el trabajo, independientemente del horario. Si tiendes a ser “workaholic” tendrás que medirte muy bien y poner límites claros.
Compromiso
- Lo más importante es que tengas presente que el principal comprometido con el esquema de home office es uno mismo. Es necesario conocer la propia autonomía y tomar responsabilidad de nuestros resultados y actividades diarias.
Familia
- Es perfecto para los padres que quieren pasar más tiempo con sus hijos. Al disminuir el tiempo de traslado pueden estar más horas con la familia.
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Existen muchos modelos laborales y todo apunta a que seguirán cambiando ciertos paradigmas. La productividad no se mide en el tiempo empleado, sino en el tiempo efectivo, los resultados y los cambios que cada uno hace. Es vital mantener nuestra mente abierta y saber lo que queremos.