Una fotografía de los boletos de avión puede ser suficiente para que los delincuentes interesados en robar la identidad sean capaces de usar un nombre ajeno para volar o tomar posesión de una cuenta; algo a lo que la BBC se ha referido como una “epidemia” por el alto número de casos ocurrido en la primera mitad de 2017.

El rango de población más afectado es el que ronda los 30 años; y es que, pese a que cada día existe mayor conciencia para contar con contraseñas más seguras, el acceso suele hacerse mediante fotografías de códigos de reserva temporales y no muy seguros como el PNR (Passenger Name Record).

En estos casos, cualquiera que conozca el PNR y apellido de otra persona puede hacer uso del portal de registro de internet para obtener vuelos gratuitos. En algunos sitios, basta con el apellido del pasajero y la hora de salida para conectarse como pasajero registrado y recibir una copia del pase de abordar.

Debido a los acuerdos de código compartido entre varias aerolíneas es posible utilizar un PNR para iniciar sesión en más de un sitio web de estas; con lo cual, los delincuentes pueden obtener acceso e información personal adicional.

Basta con una fotografía de los boletos de avión que haya sido compartida en redes sociales, y en la que aparezca un código de reservación claramente legible, para entrar al sitio de la aerolínea y obtener los datos de registro del usuario: información personal, fecha de nacimiento, número de pasaporte, entre otros, algunos de los cuales pueden ser utilizados después como forma de autentificación.

Desde principios de año, Michal Spacek, experto en desarrollo y ciberseguridad, había advertido acerca de este tipo de robos; pero, desafortunadamente, ni usuarios ni pasajeros tomaron las medidas pertinentes y, a más de la mitad del año, este problema se ha hecho cada vez más común.

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Recomendaciones

Si existe el deseo por compartir las fotografías en redes sociales para mostrar a los amigos y conocidos que se está por realizar un viaje, es aconsejable cubrir con negro los nombres, códigos de reserva, fechas o códigos de barra; desaconsejando el hacer la imagen borrosa, ya que, con los programas adecuados, los pixeles pueden ser revertidos.

Un consejo que no solo aplica para las fotografías, sino también para los pases de abordar físicos, por lo cual es preferible deshacerse de ellos en lugar de tan solo olvidarlos en el avión.

Fuente: Vice